Multitudinaria celebración en Esquina por las patronales de santa Rita de Casia

Miles de fieles participaron en la procesión y misa central en honor a la santa. El obispo Adolfo Canecín (Goya) presidió la celebración, invitando a vivir la fe con esperanza y compromiso.

En el contexto de las fiestas patronales en honor de santa Rita de Casia, el obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecín, presidió una misa en la ciudad de Esquina, al sur de la provincia de Corrientes.

La celebración congregó a una multitud frente al templo parroquial, donde los fieles rindieron homenaje a la santa conocida como la "abogada de lo imposible".

En su homilía, monseñor Canecín destacó la importancia de vivir la fe con compromiso y esperanza, invitando a los presentes a reflexionar sobre el sentido de la peregrinación.

"¡Qué lindo es que nosotros como peregrinos pasemos la vida haciendo el bien!", expresó el obispo, en el marco del Año Jubilar que la Iglesia celebra con el lema "Peregrinos de Esperanza".

Procesión por las calles
La jornada comenzó con una multitudinaria procesión por las calles de Esquina, donde la imagen de Santa Rita fue acompañada por fieles, peregrinos y autoridades religiosas.

Acompañaron al obispo, el vicario general de la diócesis de Goya, presbítero Juan Carlos Mendoza; el párroco local José Ortíz; y varios sacerdotes de la región y de otras diócesis.

Durante la homilía, monseñor Canecín profundizó sobre el llamado a vivir la fe activamente: "El Señor quiere que seamos peregrinos, no meros turistas. El turista está de paso, mientras que el peregrino se involucra".

Asimismo, invitó a los fieles a examinar su vida en este Año Jubilar, preguntándose si viven como auténticos peregrinos, comprometidos con la mirada y el mensaje de Cristo.

Citando los textos bíblicos del día, el obispo resaltó la figura de santa Rita como ejemplo de confianza en Dios, perdón y oración constante.

"Rita supo fiarse de Dios. Oró por su esposo hasta su conversión, perdonó a sus asesinos, y rezó por sus hijos. Por eso, actuó según la voluntad de Dios", señaló.

También llamó a los presentes a confiar en el Señor más allá de las circunstancias difíciles: "Pidamos al Señor la gracia de esperar en Él, de vivir en esperanza. Porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos ha sido dado".

La celebración concluyó con un llamado a vivir el evangelio a través del amor al prójimo. "Hagan a los demás lo que quisieran que los demás hagan por ustedes", recordó el obispo citando a Jesús, y animó a construir la cultura del encuentro y la amistad social como camino hacia una sociedad más justa y fraterna.+