Europa nunca debe olvidar sus raíces judeocristianas, afirmó el Papa
- 10 de diciembre, 2025
- Ciudad del Vaticano (AICA)
A una delegación de miembros del Parlamento Europeo, el pontífice los instó a defender los derechos inherentes de cada persona, desde la concepción hasta la muerte natural.
El papa León XIV se reunió este miércoles con una delegación del Grupo de Conservadores y Reformistas Europeos (ECR) del Parlamento Europeo, fuerza política dentro del órgano legislativo de la Unión Europea
Durante el encuentro, el Papa agradeció a los políticos elegidos democráticamente por su servicio a sus electores y a la comunidad europea en general.
Los instó a no olvidar nunca su deber de incluir a las personas marginadas de la sociedad, al tiempo que buscan promover el bien común.
El Papa León señaló que la característica de cualquier sociedad civilizada es la capacidad de debatir las diferencias de forma abierta y respetuosa, y afirmó que este aspecto "da testimonio de nuestra reverencia por la dignidad dada por Dios a todos los hombres y mujeres".

"Me sumo al llamamiento de mis predecesores recientes de que la identidad europea sólo puede entenderse y promoverse en referencia a sus raíces judeocristianas", subrayó.
La razón para mantener este legado religioso, añadió, no es únicamente salvaguardar los derechos de las comunidades cristianas o preservar costumbres y tradiciones sociales pasajeras. Se trata, sobre todo de "reconocer un hecho".
"Todos somos beneficiarios de la contribución que los miembros de las comunidades cristianas han hecho y siguen haciendo para el bien de la sociedad europea", afirmó.
Recordó el patrimonio cultural de Europa: sus imponentes catedrales, su arte y música sublimes y los avances científicos y el crecimiento y expansión de las universidades.
"Estos acontecimientos crean un vínculo intrínseco entre el cristianismo y la historia europea", afirmó, calificándola como "una historia que debe ser apreciada y celebrada".

León XIV defendió adenñas el patrimonio intelectual de la Europa cristiana, esencial para salvaguardar los "derechos divinamente otorgados y el valor inherente de cada persona humana, desde la concepción hasta la muerte natural".
Al mismo tiempo, subrayó que los principios éticos de Europa ofrecen bases sólidas para responder a los desafíos que plantean la pobreza, la exclusión social, los problemas climáticos y la violencia.
"Para garantizar que la voz de la Iglesia, en particular a través de su doctrina social, siga siendo escuchada", dijo, "no se trata de restaurar una época pasada, sino de asegurar que no se pierdan recursos clave para la cooperación y la integración futuras".
El Obispo de Roma recordó luego la promoción que hizo el papa Benedicto XVI del diálogo entre razón y fe, que interactúan de manera "mutuamente purificadora".
El pontífice concluyó señalando que los políticos desempeñan un papel importante a la hora de fomentar el respeto de las necesidades y competencias de cada persona. "Mi oración es que ustedes desempeñen su propio papel y participen positivamente en este importante diálogo, no sólo por el bien de los pueblos de Europa, sino de toda nuestra familia humana".+