El Vaticano inauguró el pesebre y el árbol de Navidad en la Plaza de San Pedro

  • 16 de diciembre, 2025
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
El acto fue presidido por la hermana Raffaella Petrini, presidenta de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano y atrajo a numerosos fieles, peregrinos y turistas.

La hermana Raffaella Petrini, presidenta de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, presidió la tradicional ceremonia de descubrimiento del pesebre e iluminación del árbol de Navidad de la Plaza de San Pedro, en el Vaticano, que atrajo a numerosos fieles, peregrinos y turistas, así como a delegaciones de diócesis y municipios que donaron estos adornos navideños.

El pesebre de este año fue preparado por la diócesis de Nocera Inferiore-Sarno y se inspira en la arquitectura y el patrimonio espiritual de la región de Agro Nocerino-Sarnese. Su escenario incluye el Baptisterio de Santa María la Mayor en Nocera Superiore, la Fuente de Helvius y patios característicos de la arquitectura del sur de Italia. Una de las inspiraciones fue san Alfonso María de Ligorio, autor de uno de los villancicos italianos más famosos, Tu scendi dalle stelle. Este es el título del pesebre de este año.

El árbol de Navidad, a su vez, es un impresionante abeto rojo de 25 metros de altura procedente del valle de Val d'Ultimo, en el Tirol del Sur, donado por los municipios de Lagundo y Ultimo. Iluminado por cientos de luces centelleantes, pretende ser un símbolo de esperanza y anticipación de la venida de Cristo a la Plaza de San Pedro.

Signos visibles de la esperanza
En su discurso, la hermana Petrini destacó que tanto el pesebre como el árbol de Navidad son "signos visibles de la esperanza y la luz que Dios ofrece continuamente a la humanidad". Señaló que contemplar el Nacimiento de Jesús nos ayuda a redescubrir el misterio de Dios haciéndose hombre y entrando en la historia del mundo con el "poder cautivador del amor".

Refiriéndose a las figuras de san Francisco de Asís, creador del primer pesebre en Greccio, Italia, y san Alfonso María de Ligorio, la hermana Petrini recordó que la verdadera paz es un don de Dios, no solo el fruto del esfuerzo humano. Enfatizó que todos están llamados a vivir la paz como una forma concreta de actuar en la vida diaria, eligiéndola no solo como una meta, sino como un camino.

"El pesebre enfatizó, no solo pretende recordar acontecimientos de hace 2.000, sino permitirnos revivirlos, conmover corazones, revelar la ternura de Dios y despertar la fe en la vida que triunfa sobre la muerte. El árbol de Navidad, a través de su luz y adornos, también transmite un mensaje de comunión, cuidado de la creación, paz y fraternidad universal".

Las decoraciones navideñas en la Plaza de San Pedro permanecerán hasta el final de las fiestas navideñas, el domingo del Bautismo del Señor, el 11 de enero.+