Obispos santiagueños: 'La Navidad es Jesús, y con Él renacemos a la esperanza'
- 26 de diciembre, 2025
- Santiago del Estero (AICA)
Al concluir el Año Jubilar, invitaron a redescubrir la esperanza cristiana, comprometerse con los más frágiles y construir fraternidad, justicia y paz desde el pesebre.
Con motivo de la celebración de la Navidad y en el cierre del Año Jubilar 2025, el cardenal Vicente Bokalic CM, arzobispo de Santiago del Estero; monseñor Enrique Martínez Ossola, obispo auxiliar, y monseñor José Luis Corral SVD, obispo de Añatuya, hicieron llegar un mensaje conjunto al pueblo de Dios, en el que destacaron que la esperanza cristiana tiene un nombre y un rostro concretos: Jesucristo.
En su saludo pastoral, los obispos señalaron que la esperanza nace en el pesebre de Belén, donde Dios se hace cercano y tierno, entrando sin miedo en la historia humana. En el Niño Dios, afirmaron, el Señor sale al encuentro de todos y recuerda que nadie está solo. Esa esperanza, propia del misterio de la Navidad, impulsa a ponerse de pie, a seguir caminando y a salir al encuentro de los demás, especialmente de quienes se sienten desalentados, tristes o angustiados.
Los pastores santiagueños subrayaron que la vivencia auténtica de la Navidad lleva a organizarse como comunidad y a convertirse en espacio de acogida. Desde el pesebre, todos son convocados a reconocerse hermanos, a practicar el buen trato, el cuidado amoroso, la escucha respetuosa y el servicio desinteresado.
En ese sentido, afirmaron con claridad que nadie es un "problema social", sino un hermano o una hermana que interpela y compromete, porque todos forman parte de una misma familia.
Caminos de comunión y reconciliación
El mensaje destacó también que celebrar la Navidad es ser testigos de la Buena Noticia que impulsa a abrir caminos de comunión y reconciliación, y a tejer una sociedad nueva fundada en la justicia, la paz, la unidad y la fraternidad. Los obispos recordaron que el misterio de la encarnación del Verbo de Dios lleva a reconocer a Cristo en la carne sufriente de los pobres, de los hambrientos, de los enfermos y de los encarcelados, llamando a la solidaridad y a la comunión.
En este marco, citaron al papa León XIV, quien en la exhortación Dilexit te afirma que "cuando la Iglesia se inclina hasta el suelo para cuidar de los pobres, asume su postura más elevada". Desde esa convicción, alentaron a la Iglesia a ir al encuentro de Cristo presente en los más vulnerables, ofreciéndoles afecto y hospitalidad.
Finalmente, los obispos invitaron a acoger al Niño Dios como compañero de camino en medio de las dificultades, a no bajar los brazos y a esperar contra toda esperanza. Llamaron a ser artesanos de una paz desarmada y desarmante, desterrando la violencia y superando los muros de la indiferencia y la injusticia.
Con una bendición especial para todas las personas y comunidades de la región, expresaron su deseo de que 2026 sea un tiempo de gracia para renovar el compromiso de caminar juntos, bajo la luz que brota de Belén.+
[Texto completo del mensaje de los obispos de Santiago del Estero]