El Sínodo anual de la iglesia caldea ve con preocupación los numerosos conflictos que están desgarrando a las comunidades cristianas que viven en Medio Oriente.
Sólo se reparten 100 entradas para cada una de las nueve diócesis malayas, sin importar cuán grande sea el territorio ni cuántos creyentes vivan en él.
Filipinas y China acordaron establecer nuevos canales de comunicación para abordar la disputa que mantienen sobre soberanía marítima.
El Patriarca Latino de Jerusalén expresó su convicción de que la Iglesia debe evitar ser absorbida por el conflicto y transformarse en una presencia constructiva. Llamó a evitar la polarización.