Francisco animó a los desplazados a elegir la fraternidad y el perdón para cultivar un mañana mejor. "Sean semillas de esperanza", pidió
En la catedral de Santa Teresa, en Juba, Francisco mantuvo un encuentro con los obispos, sacerdotes, diáconos, consagrados y seminaristas de Sudán del Sur.
En su primer discurso en tierras sursudanesas, el Papa recordó que el pueblo "llora por la violencia que sufre, por la perenne inseguridad, por la pobreza que lo aqueja y por los desastres naturales.
Francisco llegó a la capital sursudanesa, Juba, donde permanecerá 48 horas. El pontífice fue recibido el presidente del país Salva Kiir Mayardit, quien lo recibió a los pies de la escalerilla.