"Los cónyuges que viven en unidad y en fidelidad reflejan bien la imagen y la semejanza de Dios. Esta es la buena noticia: que la fidelidad es posible, porque es un don, tanto en los cónyuges como en los presbíteros", dijo esta mañana el papa Francisco a los prelados auditores, oficiales, abogados y colaboradores del Tribunal de la Rota Romana, con motivo de la solemne inauguración del año judicial.
La parroquia del Espíritu Santo, en el barrio Los Ceibos de la capital catamarqueña, culminó del 2018 con una celebración muy especial: acompañados por familiares y por los fieles de la comunidad, se unieron en matrimonio cuatro parejas.
"El cuerpo humano no es un instrumento de placer, sino el lugar de nuestro llamado al amor, y en el amor auténtico no hay espacio para la lujuria y para su superficialidad. ¡Hombres y mujeres merecen más que esto!", exclamó el Santo Padre al concluir hoy, miércoles 31 de octubre, la audiencia general, celebrada en la Plaza de San Pedro, en la que el pontífice dedicó su catequesis a reflexionar sobre el sexto mandamiento: "No cometerás adulterio" y en el significado auténtico de la sexualidad en la visión cristiana.
"El llamado a la vida matrimonial requiere un discernimiento cuidadoso sobre la calidad de la relación y un tiempo de compromiso para verificarla", explicó el papa Francisco hoy, durante la audiencia general celebrada en la Plaza de San Pedro en la que continuó con su catequesis sobre el Decálogo, dedicada este miércoles al sexto mandamiento: "No cometerás adulterio".