En una entrevista con Canale 5, Francisco se refrió a la guerra como una "mística de la destrucción".
Para Navidad y Año Nuevo, Mons. Álvarez Gómez pidió "reconciliación, perdón y paz" a los distintos actores armados de la zona.
Es parte del llamamiento de los obispos de Haití en su mensaje de Navidad, para que los grupos armados y quienes los financian detengan "la locura del odio y el desprecio por la vida".
El arzobispo de San Juan llamó a disponer espiritualmente para recibir al Niño y recordó que "en Navidad Dios nace en fragilidad y se pone del lado de los postergados, de los que no cuentan".