La Asociación Católica para la Comunicación, Signis Venezuela, hizo público un comunicado en el que expresó su preocupación y solidaridad hacia los 11 periodistas -comunicadores sociales, periodistas y trabajadores de la prensa venezolanos y extranjeros- que fueron privados de su libertad por la fuerzas del orden adeptas al gobierno de Nicolás Maduro, durante el 29 y 31 de enero.
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) expresó su solidaridad con la Iglesia en Venezuela ante la grave crisis social y política que atraviesa el país. En un comunicado publicado este 30 de enero, los obispos mexicanos aseguraron que "la Iglesia tiene un solo sentir ante la defensa de la dignidad del hombre, el respeto y la custodia de sus derechos universales, fundamentalmente la vida, la libertad y la justicia".
"Ante los trágicos episodios de desplazamiento forzado de personas por razones sociales, étnicas y de ambición, que han causado grandes sufrimientos a algunos grupos, todos juntos debemos vencer el mal con el bien. En otras palabras, es nuestro deber acoger a los necesitados", escribieron los obispos ecuatorianos en un mensaje dirigido "a todos los fieles y ciudadanos en general", para recordar el deber de ayudar a los necesitados, incluidos los migrantes.
"En nombre de Dios, y en nombre de este sufrido pueblo, cuyos lamentos suben hasta el cielo? Cese la represión!", pidió en un comunicado la Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), y exigió "cesar la violación de derechos humanos y garantizar los derechos de todos los ciudadanos".