El obispo de San Isidro recordó que el Reino de Jesucristo es aquel "de la verdad y de la vida, de la santidad y de la gracia, de justicia, de amor y de paz".
"Necesitamos fortalecer nuestra esperanza, que es ardua pero es cierta" planteó el obispo de San Isidro, y subrayó: "La Palabra del Señor y su promesa no pueden engañarse ni engañarnos".
El obispo destacó la confiaba que la viuda del Evangelio tenía en la Providencia, al punto de entregar todo en la limosna. Por eso, aseguró, "el Señor la quiere señalar como un verdadero modelo".
El obispo de San Isidro invitó a responder "amor por amor desde el corazón" y a pedirle al Señor que "puedan resonar en nosotros, nuevamente, las palabras del primer mandamiento".