"En Pentecostés, con la fuerza del Espíritu Santo, encuentra la dirección, el entusiasmo y el fervor para no encerrarse", destacó el arzobispo de Mendoza en su homilía dominical.
El arzobispo de Mendoza sintetizó la celebración de la Ascensión del Señor como "la fiesta de la madurez a la que Dios nos invita" para dar testimonio.
"Que san Vicente Ferrer nos ayude a ser conscientes de un amor de elección, que nos amó primero y que nos destinó para dar frutos y frutos abundante", destacó el arzobispo de Mendoza.
Fue en el estadio Arena Aconcagua, donde el arzobispo Marcelo Colombo animó a prolongar la disponibilidad misionera y renovó el llamado a estar cerca de los sectores más desfavorecidos y dolientes.