Fue antes de asomarse al balcón central de la basílica para la oración del Regina Coeli. El pontífice también se detuvo a rezar ante las tumbas de sus predecesores.
Destacaron lo que significó para ellos estar allí, bajo la mirada, del "pastorazo" que fue Bergoglio. Valoraron que León XIV lo lleve en el corazón y le pidieron que lo acompañe desde el cielo.
"No podremos equivocarnos si sabemos que María, nuestra madre, nos sigue acompañando y nos sigue sosteniendo", aseguró el obispo castrense. obispo castrense en la fiesta de María de Luján
Los participantes del plenario episcopal le enviaron una carta al Papa, manifestándole la voluntad de caminar como Iglesia "en fidelidad al Evangelio, en espíritu sinodal y con corazón misionero".