Referentes del organismo arquidiocesano recibieron a trabajadores estatales en el atrio de la catedral, donde fueron bendecidos y se rezó por las fuentes de empleo y la paz social.
El arzobispo de Córdoba afirmó que el bautismo del Señor es el camino a seguir, por lo que llamó a revisar "nuestro propio bautismo, nuestra propia misión".
El arzobispo cordobés bendijo al personal y a los jefes del cuartel central, y dialogó con ellos. También recorrió las instalaciones y bendijo el oratorio.
En su oración navideña, el arzobispo de Córdoba invitó a ponerle palabras a la venida de Jesús al corazón de cada uno, respondiendo a la pregunta: "¿A qué viene Jesús a mi vida?"