El Papa meditó el Evangelio de Mateo, alentó a no perder la esperanza en la prueba y recordó que Jesús sigue hablándonos desde los pobres, los últimos y los que sufren.
El arzobispo sanjuanino propone mirar la incertidumbre como parte del camino creyente y llama a reconocer a Cristo en signos concretos de misericordia y esperanza.
El arzobispo invitó a vivir el Adviento con apertura a la novedad de Dios, un camino que incluye conversión, austeridad y la decisión de acoger fraternalmente a los demás.
El obispo de Río Cuarto invitó a pedirle a Dios la gracia de "una Navidad donde Jesús pueda nacer verdaderamente en medio de nuestro corazón y en medio de nuestra comunidad".