Con profunda alegría y espíritu misionero, la Iglesia en el Perú inició el jubileo en honor del segundo arzobispo de Lima y patrono del episcopado latinoamericano.
En un mensaje a los delegados diocesanos de Patrimonio Cultural del Perú, el Papa recordó que la labor con el patrimonio cultural no es solo técnica, sino profundamente eclesial y evangelizadora.
Organizadas por el episcopado, profundizarán sobre la vida y el legado de Santo Toribio, Santa Rosa, San Martín, San Juan Macías y San Francisco Solano, entre otros, que marcaron la fe peruana.
Con el lema "Transformando el sufrimiento en Amor y Esperanza" más de 600 participantes se dieron cita en la diócesis de Abancay.