En su reflexión semanal, el obispo emérito de San Isidro exhortó a vivir la esperanza y a reconocer en los pobres la presencia del corazón de Jesús.
En la fiesta de la dedicación de la basílica de San Juan de Letrán, el obispo emérito de San Isidro recordó que el verdadero culto a Dios nace del corazón y no de prácticas externas o intereses.
"Pidámosle a la Virgen que nos ayude a achicarnos nosotros para que la puerta sea una puerta por la que podamos pasar todos", sugirió el obispo emérito de San Isidro.
El obispo emérito de San Isidro animó a "caminar mejor para servir, caminar mejor para estar atentos a los demás, caminar mejor para vivir la alegría del Señor y de su Reino".