Mons. García: 'La Navidad es una gran alegría para todo el pueblo'

Un mensaje centrado en la cercanía de Dios en lo cotidiano. El obispo de San Justo invitó a reconocerlo en la fragilidad humana, vivir la fraternidad y asumir el compromiso de la esperanza compartida.

En su mensaje de Navidad, el obispo de San Justo, monseñor Eduardo García, destacó el sentido profundo del nacimiento de Jesús como Emmanuel, "Dios-con-nosotros", y subrayó que la encarnación es la confirmación de que la humanidad no está sola, sino acompañada por un Dios que se hace cercano en la vida cotidiana.

El obispo matancero afirmó que Dios no actúa desde el poder ni el espectáculo, sino que irrumpe en la fragilidad y en lo pequeño, desarmando seguridades y abriendo el camino de la esperanza.

"Decir que Jesús es Emmanuel es afirmar algo definitivo: no estamos solos. Dios ha unido su suerte a la nuestra", expresó.

Dios para nosotros
En su reflexión, monseñor García remarcó que Jesús es "Dios para nosotros" y que con su nacimiento surge una humanidad nueva, basada en la fraternidad, donde nadie vale más por su origen, su cultura o su poder. En ese marco, sostuvo que amar y respetar al prójimo es amar y respetar a Dios.

Finalmente, invitó a vivir la Navidad con los ojos y el corazón abiertos para reconocer la presencia de Dios en lo pequeño, en lo frágil y en lo cotidiano, y recordó que la alegría del nacimiento de Jesús es un derecho de todos y una responsabilidad compartida.

"Dios sigue naciendo allí donde hay amor, perdón, justicia, solidaridad y esperanza", concluyó.+