León XIV: 'El pesebre trae luz, ¡cultivemos esta tradición!

El Papa recibió a cerca de mil participantes del "Pesebre Viviente", "portadores de consuelo e inspiración", que desfilarán por las calles de Roma.

"El pesebre es un signo importante. Nos recuerda que también nosotros participamos en este gran acontecimiento de salvación", dijo el papa León XIV al dar la bienvenida este sábado a los aproximadamente mil participantes en el 'Pesebre Viviente' de Santa María la Mayor, que desfilaron por las calles de Roma y pidió que "mantengan viva esta tradición".

Citando a San Agustín, recordó el mensaje central de la Navidad: "Dios se hizo hombre para que el hombre se convirtiera en Dios, para que el hombre, habitando en la tierra, encontrara refugio en el cielo".

El don de la luz
El Papa animó a los presentes a difundir este mensaje y a mantener la tradición del belén navideño. Es un regalo de luz para nuestro mundo, que necesita desesperadamente esperanza, añadió el Santo Padre.

Como San Francisco de Asís
León XIV recordó que la Basílica de Santa María la Mayor de Roma suele llamarse el "Pesebre de Occidente" porque alberga la reliquia del pesebre donde yació el Niño Jesús. Fue esta reliquia la que inspiró a San Francisco de Asís, quien en 1223 creó el primer pesebre. A partir de entonces, la costumbre se extendió por toda la Iglesia, enriqueciéndose con elementos de diversas culturas y escenas de diferentes regiones del mundo.

El pesebre es un estímulo para seguir a Cristo
Citando a Benedicto XVI, el Santo Padre señaló que, en Navidad, el Salvador viene a nosotros como un niño indefenso e impotente para vencer el orgullo, la violencia y la avaricia humanos, y para guiarnos hacia nuestra verdadera identidad. Por lo tanto, el pesebre es también un punto de partida. Desde él, nos disponemos a comenzar una nueva vida siguiendo los pasos de Cristo.

Desde la gruta de Belén, donde María, José y el Niño se encuentran en su desgarradora pobreza, partimos para comenzar una nueva vida siguiendo los pasos de Cristo. Ustedes darán testimonio de ello por la tarde, con la procesión que recorrerá las calles de la ciudad. Con su coreografía, vestuario y música, será una muestra gozosa de lo hermoso que es ser discípulo de Jesús, Dios hecho hombre.

Luz para un mundo que permanece en oscuridad
Serán testigos de esto esta tarde al caminar en procesión por las calles de la ciudad. Con coreografías, vestuario y música, será una muestra gozosa de la belleza de ser discípulos de Jesús, de Dios hecho hombre, el sol que nace "para iluminar a los que viven en tinieblas y sombra de muerte, para guiar nuestros pasos por el camino de la paz". 

El Papa enfatizó que, gracias a esto, los participantes del pesebre viviente se convierten en peregrinos de esperanza, llevando consuelo e inspiración a todas las personas que encuentran.

León XIV destacó a "los pequeños y los grandes", a las familias, a los jóvenes y a los ancianos, y a "los que se alegran y los que sufren", a los que están solos y a los que "sienten vivo en su corazón el deseo de amar y ser amados", sin olvidar a los que siguen "trabajando con dedicación y perseverancia en la construcción de un mundo mejor", incluso con dificultades.

El programa para los participantes en el 'Pesebre Viviente' incluye también el paso por la Puerta Santa de la Basílica de Santa María la Mayor, junto a la tumba del Papa Francisco y la veneración de la reliquia de la 'Sagrada Cuna', una misa presidida por el cardenal Rolandas Makrickas, arcipreste de esa basílica mariana, el 'Belén de Occidente', y, durante la tarde de este sábado, la procesión desde la Iglesia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Roma hasta la basílica.+