León XIV a consagrados latinoamericanos: 'La vocación exige el primado absoluto de Dios'
- 12 de diciembre, 2025
- Ciudad del Vaticano (AICA)
El Papa dirigió un mensaje a sacerdotes, religiosas, religiosos y seminaristas de América Latina que estudian en Roma, reunidos en el Vaticano con motivo de la fiesta de la Virgen de Guadalupe.
"Vivimos en una sociedad de ruido que crea confusión, hoy necesitamos servidores y discípulos que proclamen el primado absoluto de Cristo, señaló el papa León XIV en un mensaje dirigido a los sacerdotes, seminaristas, religiosos y religiosas latinoamericanos que estudian en Roma, reunidos el 12 de diciembre en el Vaticano.
El encuentro fue organizado por la Comisión Pontificia para América Latina sobre "María: Estrella de la evangelización y de la misión para América Latina hoy", en el día de la festividad de Nuestra Señora de Guadalupe.
"Cuando Jesucristo llamó a sus discípulos, casi invariablemente utilizó la palabra 'sígueme'. En esa breve palabra podemos encontrar el propósito más profundo de nuestra vida, sea como seminaristas, como sacerdotes o como miembros de la vida consagrada", dice el Papa al inicio de su mensaje.
León XIV centró su reflexión sobre la llamada vocacional: "Si releemos los textos evangélicos de llamada -observa el Papa-, lo primero que constatamos es la absoluta iniciativa del Señor. La llama, sin ningún mérito previo por parte de sus interlocutores y mirando más bien a que la vocación a la que los convoca sea una oportunidad para llevar el mensaje evangélico a los pecadores y a los débiles".

También el Santo Padre refiere sobre la exigencia del Evangelio, que "nos exhorta a tomar conciencia del compromiso que supone responder a esta vocación. Nos habla de unas exigencias que podemos individuar en la llamada frustrada al joven rico: la exigencia de la primacía absoluta de Dios, el único bueno; la exigencia de la necesidad imperiosa del conocimiento teórico y práctico de la ley divina y la exigencia del desasimiento de toda seguridad humana, con la consecuente oferta de todo lo que somos y lo que tenemos".
El eco de los aplausos dura poco
El Papa hizo un llamado a los consagrados latinoamericanos a anunciar la primacía absoluta de Cristo, ante una sociedad de ruidos que confunde: "Este conocimiento teórico y práctico de la Ley divina se alcanza ante todo gracias a la lectura de las Sagradas Escrituras, meditada en el silencio de la oración profunda, a la reverente acogida de la voz de los legítimos pastores y al estudio atento de los muchos tesoros de sabiduría que nos ofrece la Iglesia".
Y los animó a que, en medio de las dificultades y las crisis, la consigna sea: "Si Cristo pasó por ahí, también nos corresponde vivir lo que Él vivió. No debemos apegarnos a los aplausos porque su eco dura poco; tampoco es sano quedarnos sólo en el recuerdo del día de crisis o de los tiempos de amarga decepción".
"Miremos más bien que todo ello es parte de nuestra formación y digamos: si Dios lo ha querido para mí yo también lo quiero. El vínculo profundo que nos une con Cristo, sea como sacerdotes, consagrados o seminaristas, tiene una semejanza con aquello que se dice a los esposos cristianos en el día mismo de su boda: 'en la salud y en la enfermedad; en la pobreza y en la riqueza'".
El Papa León concluyó su mensaje encomendándolos a la Virgen María de Guadalupe, para que "enseñe a responder con valentía y conservando en el corazón las maravillas que Cristo ha hecho en nosotros, para así, sin demora, ir a anunciar la alegría de haberlo encontrado, de ser uno en el Uno y piedras vivas de un templo para su gloria".+
