Neuquén: Mons. Croxatto ordenó dos nuevos sacerdotes

El obispo confirió ese orden a los diáconos Walter Mora y José Lagos en la misa que celebró en la catedral diocesana y les pidió que "nunca pierdan la mirada entrelazada con Jesús".

La diócesis de Neuquén vivió con gran alegría la ordenación sacerdotal de los diáconos Walter Mora y José Lagos, durante la Eucaristía que presidió el obispo, monseñor Fernando Croxatto, el 12 de diciembre, día de la Virgen de Guadalupe, en la catedral María Auxiliadora.

En su homilía, monseñor Croxatto puso la celebración bajo su amparo y evocó la imagen bíblica de "una mujer vestida de sol" y confiando a María el camino sacerdotal de los nuevos presbíteros.

"Que ella los haga siempre cercanos a los pobres, consuelo y esperanza para quienes más sufren", señaló el pastor diocesano, quien recordó que la Iglesia de América está atravesada por realidades de pobreza y dolor que siempre deben ser escuchadas y atendidas. 

El sacerdocio, un don confiado
A lo largo de su mensaje, el obispo subrayó que el sacerdocio es un don confiado en la fragilidad humana, citando al santo Cura Brochero y recordando que la fidelidad no se apoya en las propias fuerzas, sino en la certeza de haber sido llamados y sostenidos por el Señor.

"Nunca pierdan la mirada entrelazada con Jesús, porque sólo desde allí se puede apacentar un rebaño que no es nuestro y edificar una Iglesia que tampoco es nuestra", les dijo.

Al finalizar la misa, los nuevos presbíteros expresaron su agradecimiento a Dios por el don de la vocación, a sus familias por el acompañamiento y la vida recibida, y a las comunidades que formaron parte de su camino de discernimiento y formación.

La comunidad diocesana agradeció al Señor por dos nuevos miembros del clero y renovó su esperanza en las vocaciones, confiando a Mora y Lagos a la intercesión de la Virgen de Guadalupe, para que su ministerio sea siempre cercano, humilde y fiel al corazón de Jesús, Buen Pastor.+