Jueves 26 de junio de 2025

El Papa criticó la 'falsa propaganda del rearme'

  • 26 de junio, 2025
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
"La gente no puede morir por noticias faltas", denunció el pontífice al reunirse con los miembros de las Agencias de Ayuda a las Iglesias Orientales (ROACO).
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El papa León XIV expresó su preocupación profunda por el número creciente de conflictos armados y la tendencia mundial al armamentismo. "¿Cómo se puede creer, tras siglos de historia, que las guerras traen la paz y no se vuelven en contra de quienes las llevan a cabo? ¿Cómo se puede pensar en sentar las bases del mañana sin cohesión, sin una visión global animada por el bien común?", se preguntó pontífice al recibir este jueves a los miembros de las Agencias de Ayuda a las Iglesias Orientales (ROACO) presentes en Roma para su asamblea plenaria.

"Falsa propaganda de rearme"
León XIV criticó duramente la "falsa propaganda del rearme", que describió como una traición al anhelo de paz del pueblo. El pontífice denunció que esta "crea la vana ilusión de que la supremacía resuelve los problemas en lugar de alimentar el odio y la venganza". 

Haciendo eco de su predecesor, Francisco, afirmó que la gente es cada vez menos consciente de "cuánto dinero fluye a los bolsillos de los mercaderes de la muerte, dinero que podría usarse para construir hospitales y escuelas; en cambio, las ya construidas se están destruyendo".

"La gente no puede morir por noticias falsas", reivindicó. 

"Nosotros, toda la humanidad, estamos llamados a evaluar las causas de estos conflictos, a verificar las verdaderas e intentar superarlas, y a rechazar las falsas, fruto de simulacros emocionales y retórica, desenmascarándolas con decisión", indicó. 

En un mensaje muy firme, el Santo Padre aseguró que "el corazón sangra al pensar en Ucrania, la trágica e inhumana situación en Gaza y Medio Oriente, devastado por la expansión de la guerra". 


Y expresó su tristeza por cómo en estos y otros contextos se está viendo "la imposición de la ley del más fuerte, con la que se legitiman los propios intereses". 

Además, calificó de "desalentador" el ver "que la fuerza del derecho internacional y del derecho humanitario ya no parecen obligar, sustituidas por el supuesto derecho a obligar a otros mediante la fuerza". Ha subrayado que esto "es indigno del hombre, vergonzoso para la humanidad y para los responsables de las naciones".  

Destrucción de hospitales y escuelas 
Por otro lado, lamentó "que la gente ignora cada vez más la cantidad de dinero que va a parar a los bolsillos de los mercaderes de la muerte y con el que se podrían construir hospitales y escuelas". No solo eso, sino que "los ya construidos se destruyen". 

Mirando en concreto a la realidad de las Iglesias orientales, el pontífice señaló que "la violencia de la guerra parece azotar los territorios del Oriente cristiano con una vehemencia diabólica nunca antes vista".  

Las Iglesias Orientales: semillas de esperanza
En su discurso, el Papa también elogió los esfuerzos de la ROACO por brindar apoyo material y espiritual a los fieles de las Iglesias católicas de rito oriental, calificando la misión de la organización como "una proclamación de alegría".

Agradeció a las organizaciones caritativas y a sus benefactores por sembrar "semillas de esperanza en las tierras del Oriente cristiano", que lamentó han sido devastadas en los últimos años por guerras y una "nube de odio".

"Para muchas personas, pobres en recursos, pero ricas en fe, son una luz que brilla en medio de las sombras oscuras del odio", afirmó.


El papa León señaló que la opresión y la incomprensión han surgido históricamente incluso dentro de la comunidad católica, que a veces no ha logrado apreciar el valor de las tradiciones cristianas orientales.

Expresó su deseo de que los ritos orientales sean mejor conocidos dentro de la Iglesia Católica, sugiriendo que se realicen cursos en seminarios y universidades católicas para informar a los católicos de rito latino sobre nuestros hermanos y hermanas orientales.

"También es necesario el encuentro y compartir la actividad pastoral", dijo, "ya que los católicos orientales hoy ya no son nuestros primos lejanos que celebran ritos desconocidos, sino nuestros hermanos y hermanas que, debido a la migración forzada, son nuestros vecinos de al lado".

El Papa destacó el "sentido de lo sagrado" de los cristianos orientales, "su fe profunda confirmada por el sufrimiento y su espiritualidad impregnada de los misterios divinos".

Finalmente, el Santo Padre elogió el testimonio del Oriente cristiano, diciendo que nuestro llamado es a "permanecer fieles a Jesús, sin dejarnos caer en las garras del poder".

"Sigamos a Cristo, que liberó los corazones del odio, y mostremos con nuestro ejemplo cómo liberarnos de la mentalidad de división y venganza".+