Obispos europeos piden no incluir al aborto entre los derechos de las mujeres

Tras la votación en el Parlamento Europeo sobre "Mi voz, mi elección. Por un aborto seguro y accesible", el Comece expresó "serias preocupaciones" sobre la el objetivo de la iniciativa.

La Comisión de las Conferencias Episcopales de la Unión Europea (Comece) publicó una declaración en la que expresa "serias preocupaciones" sobre el objetivo general de la iniciativa ciudadana "Mi voz, mi elección: Por un aborto seguro y accesible", votada recientemente en el Parlamento Europeo.

"El debate sobre el aborto no necesita más divisiones ideológicas, sino políticas prudentes que realmente protejan y apoyen a las mujeres, salvaguardando al mismo tiempo la vida de los no nacidos. Llamamos a los eurodiputados a votar con responsabilidad", se lee en el comunicado.

Acceso al aborto independientemente de las normas jurídicas nacionales
El objetivo de la iniciativa "Mi voz, mi elección: por un aborto seguro y accesible"es crear un mecanismo de financiación de la UE para servicios relacionados con el aborto en el contexto de la "salud y los derechos sexuales y reproductivos" para garantizar el acceso al aborto independientemente de las normas legales nacionales.

La Comece destaca, sin embargo, que si bien el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE) insta a la Unión a mejorar el acceso a una atención sanitaria de alta calidad con vistas a lograr la atención sanitaria universal, también establece claramente que "la acción de la Unión no afectará a las responsabilidades de los Estados miembros en la definición de su política sanitaria y en la organización y prestación de servicios de salud y atención médica".

Según la Comece, esta disposición es de particular importancia en áreas muy sensibles como la regulación del aborto, donde los Estados miembros han adoptado marcos jurídicos diferentes que reflejan opciones éticas, culturales y sociales.

"El mecanismo de apoyo financiero no debe tener como finalidad o efecto socavar las disposiciones de orden público de los Estados miembros ni, de forma más general, las decisiones sanitarias y éticas adoptadas por los Estados miembros en el ejercicio de sus competencias en el ámbito de la salud", se lee en la declaración.

Políticas que protejan y apoyen a las mujeres y a la vida por nacer
Los obispos europeos expresan también su profunda preocupación por las posibles consecuencias que los repetidos intentos de eludir las competencias nacionales y el principio de subsidiariedad por razones ideológicas pueden tener sobre las sociedades europeas y el proyecto europeo en su conjunto, especialmente en el contexto crítico y altamente polarizado actual.

"En el debate sobre el aborto", afirma el comunicado, "no hay necesidad de más divisiones ideológicas, sino de políticas prudentes que realmente protejan y apoyen a las mujeres, al tiempo que protegen la vida humana no nacida".

La Secretaría de los obispos de la UE enfatiza además que el concepto colectivo de "salud y derechos sexuales y reproductivos" no puede abarcar el aborto como un servicio básico de salud universalmente accesible. "Una intervención médica de tal gravedad y con implicaciones éticas tan significativas no puede ni debe normalizarse", enfatiza la Comece, señalando que otros marcos legales basados en decisiones políticas éticas de los Estados miembros son posibles y legítimos.

Por último, el comunicado de los obispos europeos destaca que ya existen programas sanitarios de la UE que abordan situaciones transfronterizas que están en consonancia con la división de competencias dentro de la UE, como el Programa de Salud de la UE 2021-2027.

Por lo tanto, la Comece alentó firmemente a los miembros del Parlamento Europeo a votar de manera responsable, teniendo en cuenta las consecuencias de esta iniciativa en el contexto europeo actual, así como la necesidad de respetar el marco de competencias existente de la UE en el ámbito del aborto y los programas de salud existentes de la UE.+