Mons. Ojea: 'El Evangelio se comunica a través de la alegría'

En su reflexión para el tercer domingo de Adviento, el obispo emérito de San Isidro aseguró que el Evangelio "se transmite precisamente a través de una vida marcada por la plenitud interior".

En su reflexión para el tercer domingo de Adviento, el obispo emérito de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, invitó a los fieles a vivir este tiempo litúrgico desde la alegría cristiana, fundada en la certeza de la cercanía del Señor.

Ojea destacó que la Navidad "abre el camino a una alegría profunda, serena y auténtica". "Se trata -explicó- de una alegría que nace de la verdad y se manifiesta sin estridencias, un descanso perfecto en el sumo bien, según la enseñanza de Santo Tomás de Aquino, y que está estrechamente unida a la paz interior".

El obispo emérito subrayó que esta alegría "no es fingida ni superficial, sino que brota de la experiencia viva de la cercanía de Jesús, Dios que se hace hombre para acompañar la vida de cada persona". Por ello, afirmó, "es una alegría contagiosa: el Evangelio se transmite precisamente a través de una vida marcada por esa plenitud interior".

Asimismo, Ojea destacó que "la alegría más profunda se encuentra en la misión y en el servicio al Señor, en el anuncio del Evangelio, tal como lo recuerda el papa Francisco en Evangelii Gaudium. Que nadie nos quite la alegría de la vida cristiana", exhortó.

Finalmente, señaló que la alegría cristiana también es fruto del reencuentro, a la luz de la parábola del Padre misericordioso, que invita a todos a participar de la fiesta. En este sentido, afirmó que la Navidad se celebra con gozo "porque es la certeza de la presencia del Señor en medio del pueblo, motivo de gratitud por los dones recibidos y de confianza para afrontar el futuro".+